ESPALDA DE PAPEL

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Cádiz, Andalucía, Spain
canastera de versos, alma de mujer... deseo tener las alas de la poesía. Espero de ti amigo lector, me sigas por este mundo mágico de la palabra. Aquí mis sueños, aquí mis desvaríos desde la cordura y la locura de ese alma que pretende no serte ajena. Espalda de papel. A flor de agua. Con el alma en pie. Blog© 2008

sábado, 21 de junio de 2008

La Italia.

Las notas de The Godfather,
salen del aparato de música.
La Italia toda se instala en casa,
En nuestra casa.
Callejuelas empedradas,
estrechas,
las fontanas,
las bicis, los ruidos.
¡Agua va! grita alguien por la ventana,
ropas tendidas cruzan la calle.
¡Vito! ¡Vito!
¡Andiamo a casa!
¡Ahhh! la música, sempre la música.
El sol mediterráneo
bruñendo aún más si cabe
las historias y sus personajes:
El tendero,
el cartero,
la manma,
Pier Paolo,
la pequeña Melina;
todos regresan con efecto placebo a mi memoria
endulzando mis recuerdos de azul y de agua,
de flores tempranas.
Y las curvas de la carretera
bajando el acantilado,
con el mar al frente,
envuelto mi cabello en el fular verde
que me regalaste.
Envueltos mis pensamientos,
en que tu alcoba me esperaba.

Dedicada a Yvette Nino Schryer, escritora de origen argentino ubicada en Israel.





Mírame a los ojos

Dilo.
Tan sólo repítelo y márchate,
pero esta vez, mírame a los ojos;
no se escuchar palabras de jeroglífico,
no entiendo de medias tintas.
Si me miras,
yo haré el trabajo por ti;
tus ojos serán el texto;
penetraré por tus pupilas,
viajaré hasta tu cerebro.
¡Un viaje al corazón
ya es imposible!
Tendré que observar,
razonar,
comprender,
deducir;
y conociéndome...aparecerá la empatía,
amarga hipótesis final.
Frío método científico.
Me pondré en tu lugar,
un lugar de desdicha;
Y preferiré ser la sufridora
mártir del desamor,
heroína de las penas,
compañera del destierro.
¿Cómo se pueden talar tantos recuerdos?
Cerveza y camarones ,en los domingos de azul,
"Cinema Paradiso",final emocionante,
Cinéfilos empedernidos.
Recorridos por la playa,
Tú, la voz de Hegel, Marx, Kant...
yo escuchando, aprendiendo,
continuamente bebiendo de tu alma.
Y tanto más.
pero...ya comprendí
suelto la solapa de tu camisa
suelto tus ojos.
Ya,¡Márchate!

A la memoria de Manuel Osuna.