al igual, las pinceladas malvas
del alba, que traen al fin el sueño
a mis párpados perezosos
esas,…también son mías.
Es mío el calor que en la noche
se deposita en el sexo
mientras duerme ausencias.
Es mío el recuerdo de tu tacto
imponiéndose a la mirada de los ojos,
ascendiendo a los montes de mi mapa
marcados cortafuegos,
por la presión de tus dedos.
La rotundidad de mi vientre es mía,
el verde desde el que te miro
ese que era tu océano es mío.
El aliento escapado de entre mis labios
semiabiertos, expirando suspiros,
continuamente pronunciando,
convenciéndome, de que no me perteneces,
ese...ese desaliento, también es mío.
Todo es mío menos tú,
y menos yo… que soy tuya.

4 comentarios:
Hola!!! amiga Gadeira!
me alegra tanto tener noticias tuyas, y vuelvo a felicitarte es hermoso lo que escribes! sabes yo alguna vez he queido escribir algo bonito pero para mi hija jeje y no se como combinar las palabras exactas de lo que siento para que suene bonito asi como lo haces tu!
es por eso que admiro mucho tu don de escribir.
cuidate mucho amiga Gadeira no te pierdas tanto jejej.
saluditos y, besos y abrazos desde mexico
vianey
Qué alegría volver a leer tu poesía. te eché de menos, Gadi.
Un abrazo.
amiga gusto saber de ti de nuevo!!!
jajaja no te preocupes que para que a mi me saliera de diadema tuvo que oasar como casi 1 hora y despues de haber puesto el video como 15 veces jejejej , tu sigue asi y veras que oadre te queday que gusto que hayas entrado a mi blog..
cuidate mucho y beso y un fuerte abrazo desde mexico
Bueno muy sentido y de mucha reflexión, dejando al lector observar precisamente lo que mas deseas y lo logras.
Un final perfecto, por que en la pareja no hay dueño, si no que cada pertenece al otro simplmente y eso entender es algo eterno.
un placer leerla.
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